Femur

ANATOMÍA DE FÉMUR

  El fémur es el hueso del muslo, el segundo segmento del miembro inferior. Es el hueso más largo, fuerte y voluminoso del cuerpo de la mayor parte de los mamíferos. Se encuentra debajo del glúteo y por detrás del cuádriceps.

De la clase de los huesos largos, es par y asimétrico. Presenta una ligera curvatura de concavidad posterior, y en el esqueleto se dispone inclinado hacia abajo y adentro, oblicuidad que resulta más notable en el caso de la mujer por la mayor separación entre las cavidades cotiloideas de los coxales, donde se articula el fémur por arriba -la pelvis femenina es más ancha que la masculina-.

Además, en el fémur se observa una ligera torsión: el eje del cuello femoral no está en el mismo plano que el eje transversal de los cóndilos, sino que configuran un ángulo agudo de declinación, abierto hacia dentro y adelante.

 

                              Anatómicamente, y como en todos los huesos largos, distinguimos en el fémur tres partes fundamentales:                    

  • El cuerpo o diáfisis, que presenta tres caras -anterior, interna y externa-, y tres bordes -interno, externo y posterior.
  • Epífisis -o extremo- superior, que se articula con el coxal.
  • Epífisis -o extremo- inferior, que se articula con la tibia.

 

 

El cuerpo del fémur

La diáfisis femoral es aproximadamente prismática triangular. En ella hay que describir tres caras y tres bordes.

Su cara anterior, ligeramente convexa en sentido transversal, y lisa, presta inserción en su mayor parte, y por arriba, al músculo crural, uno de los componentes de los cuádriceps crural. Más abajo, se inserta el subcrural.

La línea áspera

La línea áspera, conformada por un labio lateral -externo- y otro medial -interno-, entre los que queda un intersticio, recorre la diáfisis longitudinalmente.

Extremo superior

El extremo o epífisis superior del fémur, por dónde el hueso se articula con el coxal, presenta detalles anatómicos de muy distinta significación morfológica y funcional: la cabeza articular, los trocánteres, el cuello anatómico y el cuello quirúrgico. Esquematizando, podemos decir que la primera permite los movimientos del hueso, los segundos son zonas de importantes inserciones musculares, y ambos cuellos representan las zonas de unión entre cabeza, trocánteres y cuerpo del fémur.

 

  • Cabeza articular: Con la forma de los dos tercios de una esfera, es lisa, y está recubierta de cartílago articular debido a su función: encajar en la cavidad cotiloidea del hueso coxal, conformándose así la articulación coxofemoral. El ligamento redondo de dicha articulación se inserta en la depresión próxima al centro de la cabeza articular: la fosita del ligamento redondo.
  • Trocánter mayor: Eminencia ósea cuboidea, muy aplanada transversalmente, situada por fuera y un poco por debajo de la cabeza articular.
  • Trocánter menor. Es una apofisis conica, posteroinferior respecto al cuello del fémur, en la que se inserta el musculo psoas iliaco.
  • Cuello anatómico: Une la cabeza articular -arriba y adentro- con los trocánteres -abajo y afuera-. Con la forma de un cilindro aplanado en sentido antero posterior, el cuello anatómico del fémur  está en íntima relación con la cápsula articular de la articulación coxofemoral.
  • Cuello quirúrgico: representa la unión del cuerpo del fémur con su extremo superior.

                                  

Extremo inferior.

  • Voluminoso, el extremo o epífisis inferior se organiza en los cóndilos, dos masas laterales respecto al plano sagital de la diáfisis: cóndilo interno y cóndilo externo. En ellos se desarrolla la tróclea, superficie lisa para la articulación del fémur con la tibia en la rodilla -articulación femorotibial-.
  • Cóndilo interno: Es menor que el externo, si bien prominente hacia dentro. En su cara lateral cutánea destacan dos relieves óseos: la tuberosidad interna, inserción del ligamento lateral interno de la articulación de la rodilla, y el tubérculo del aductor mayor, para el músculo del mismo nombre. Además se inserta en esta cara el gemelo interno.
  • Cóndilo externo: Más voluminoso que el interno, presta inserción al ligamento lateral externo de la articulación de la rodilla en la tuberosidad externa de su cara lateral, así como al gemelo externo y poplíteo.

En las caras medias de ambos cóndilos -respecto al eje del fémur- se insertan los ligamentos cruzados de la articulación de la rodilla.

Finalmente, las caras anterior, inferior y posterior son articulares. En conjunto conforman la tróclea femoral con una depresión en medio, la garganta de la tróclea.

 

FRACTURAS DEL EXTREMO SUPERIOR DEL FEMUR

Las fracturas del extremo superior del fémur han sido clasificadas de diferentes maneras en especial por el distinto comportamiento en lo referente a su evolución y a los criterios terapéuticos.

Más frecuentes en personas de edad mayor y suelen ocurrir a consecuencia de traumatismos menores.Las fracturas de la extremidad superior del fémur se han clasificado con el objeto de establecer su probable evolución y deducir tratamientos adecuados.

 

FRACTURAS MEDIALES: suele aplicarse con frecuencia la clasificación de graden, que distingue cuatro tipos:

1) fractura medial incompleta

2) fractura completa no desplazada

3) fractura completa con un desplazamiento menor de 50%

4) fractura completa con un desplazamiento mayor de 50%

 

 

FRACTURAS LATERALES: Se diferencian según el trazo fracturario en pertrocantereas  e intertrocantereas, con desprendimiento o no  de estos relieves óseos, que determinan de alguna manera la estabilidad o inestabilidad de la fractura.                   

CLASIFICACION DE GARDEN

 

Clasifica las intracapsulares o mediales en cuatro grupos:

Tipo I - Fractura incompleta. Es la fractura “en valgo” y si no se contiene mediante tratamiento se puede desplazar secundariamente. Tipo II - Fractura completa sin desplazamiento. La cortical está rota pero el fragmento proximal no se ha desplazado en ningún sentido. De no contenerse mediante tratamiento puede ocurrir desplazamiento secundario. Tipo III - Fractura completa con desplazamiento parcial. Es la más frecuente y según Garden se reduce simplemente rotando hacia adentro el fragmento distal, sin traccionar. Es estable y tiene buenas posibilidades de mantener irrigada la cabeza del fémur. Tipo IV - Fractura completa con desplazamiento total. Los dos fragmentos están totalmente desvinculados uno del otro. La cabeza femoral que está suelta se conserva en posición normal, pero su irrigación queda muy comprometida.

 a) fractura sub-capital

b)Fractura medi-cervical

c) Fractura basi-cervical

d) Fractura intertrocantera

e) Fractura sub- trocantera

 

 

 

 

CUADRO CLINICO

  • Por su alta frecuencia se trata común mente de pacientes de la tercera edad  que sufren una caída simple.
  • No puede caminar ni incorporarse.
  • Presentan el miembro inferior acortado y en rotación externa especialmente en las fracturas laterales.
  • El dolor no suele ser demasiado intenso.
  • En  estas condiciones se impone el estudio radiográfico (ante posterior de pelvis y perfil de la cadera afectada) para determinar con precisión el trazo fracturario.

 

 

TRATAMIENTO

 

  • FRACTURAS MEDIALES: teniendo en cuenta el elevado número de complicaciones locales, por las razones biomecánicas expuestas (necrosis de cabeza femoral y seudartrosis), muchos autores proponen de entrada el remplazo de la cadera del fémur con una prótesis.

Sin embargo si son adultos  de una edad n muy avanzada, se trata de conservar la propia cabeza femoral mediante una reducción exacta y una osteosíntesis estable, ya que la artroplastia de cadera no está exenta de complicaciones, sobre todo a mediano y largo plazo (luxaciones, aflojamientos, etc.).

 

  • FRACTURAS LATERALES: no existiendo el peligro de las complicaciones vasculares, el problema reside en asegurar la estabilidad de la fractura.

Se han enumerado tipos de implantes, de los cuales actualmente los mas utilizados son:

  • Clavo- placa (tipo jewett) 
  • Clavo –placa deslizante, para aumentar la comprensión  interfragmentaria y Evitar la protrusión del clavo en el interior De la articulación.
  • Clavos intramedulares ( de Enders)

 

 

En resumen, la fractura de la extremidad  superior del fémur es un accidente frecuente en adultos mayores, en lo cual se requiere un rápido diagnostico para precisar la ubicación del trozo fracturario y encarar el procedimiento que permita no solo solucionar la fractura, si no también movilizar al paciente.

 

FRACTURAS DE LA DIAFISIS FEMORAL

La característica del fémur de ser el hueso más largo de esqueleto lo expone con facilidad al riesgo de sufrir fracturas. En virtud las lesiones asociadas y la posibilidad de complicaciones, puede considerarse que estas son fracturas diafisiarias mas graves. Esta denominación comprende las fracturas del fémur ubicadas por debajo del trocánter menor y hasta 6cm por encima del extremo distal.

6cm

                                               

 

Las fracturas patológicas de la diáfisis femoral se deben, por lo general, a metástasis, enfermedad de Paget o enfermedades metabólicas que provocan osteopenia.

 

MECANISMOS MÁS FRECUENTES

 

CAUSAS DIRECTAS: podemos mencionar la caída de objetos pesados o choques sobre el muslo (accidentes de tránsito) y las heridas por arma  de fuego. Estas fracturas presentan trazos característicos, multifragmentarios o transversales, cuya ubicación más frecuente es en el tercio medio de la diáfisis.

 

CAUSAS INDIRECTAS: caídas donde se traba el pie  la pierna y se exageran los movimientos de flexión o rotación, como ocurre en la mayoría de los deportes, los trazos fragmentarios suelen ser oblicuos o espiroideos según haya sido el mecanismo predominante, puede acompañarse de un tercer fragmento (en ala de mariposa) cuyo trazo puede ser incompleto.

 

 

            

 

 

DESPLAZAMIENTO:

El desplazamiento final de los fragmentos es consecutivo a la energía cinética liberada sobre el hueso y la contracción muscular defensiva y sus características dependen de la localización de la fractura y del predominio de determinados grupos musculares.

 

CLASIFICACION:

La clasificación de las fracturas no solo resulta útil para conocer  su estabilidad, si no que constituye una guía de orientación terapéutica.la clasificación más usada es la de pankovich y colaboradores, basadas en el tipo de fractura y estabilidad.

 

DIAGNOSTICO:

CLINICO: el antecedente de un traumatismo severo y las manifestaciones clínicas son, por demás elocuentes: impotencia funcional, movilidad anormal con crepitación y angulacion del muslo, acortamiento del miembro inferior, rotación externa del pie, gran deformidad y aumento del volumen del muslo (por la hemorragia y el edema).

Durante el examen clínico de la fractura deben evitarse los movimientos bruscos por ls peligros que implican: el agravamiento de los desgarros musculares la producción de lesiones vasculares y nerviosas, y la posibilidad de aumentar el hematoma.

RADIOGRAFICO:

Las posiciones de frente y perfil proporcionan datos concretos  sobre el desplazamiento y el tras fracturario.

                   

 

COMPLICACIONES

Las complicaciones inmediatas más frecuentes ocurren por lesiones vasculares con hemorragia interna profusa. Debe tenerse presente la posibilidad del shock hipovolemico y neurogenico.

Como complicaciones mediatas, deben, mencionarse la consolidación viciosa (acortamiento y rotación externa del miembro inferior), infección posoperatoria y la seudoartrosis.

 

TRATAMIENTO

El manejo de las fracturas del fémur puede seguir dos caminos: tratamiento ortopédico o quirúrgico.

TRATAMIENTO ORTOPEDICO

Se basa en la reducción lenta y continua que se efectúa por medio de tracción esquelética. Se elevan los pies del paciente poniendo un realce en las correspondientes patas de la cama para que el cuerpo del paciente actué de contrapeso, se coloca el miembro inferior sobre una férula  y se agregan pesas hasta lograr la reducción de la fractura, esto se controla radiológicamente, evitando la diastasis que pueden inducir a un retardo de consolidación.

 

TRATAMIENTO QUIRURGICO

En forma progresiva fue desplazando al  tratamiento ortopédico por las ventajas que presenta: reducción anatómica y buena estabilización del foco, para prescindir de todo tipo de inmovilización externa, y así permitir la movilización prematura de las articulaciones, prevenir rigideces no deseadas y acortar los plazos de hospitalización y descarga del pero corporal.

Los procedimientos consisten en la colocación de los siguientes materiales:

  • Clavo intramedular de kuntscher
  • Clavo intramedular acerrojado
  • Clavo de Ender
  • Placas de compresión
  • Tutores externos

 

REHABILITACION

como alumno de terapia fisica el plan de tratamiento que aria seria el siguiente.                                                                                                                                        Objetivo principal:

  • Aumentar el rango de movimiento articular (abducción, aducción, flexión, extensión; Tensor de la fascia lata, glúteo medio, Aductores)
  • Fortalecimiento del psoas
  • Disminución del dolor
  • Reeducación de la marcha
  • Propiocepcion

Plan de tratamiento

2 semanas de cirugia

1hora

Infrarrojo  (15min)

Calor  (vasodilatación relajante)

Laser  (cicatrización)

TENS- interferenciales (analgésico)

C. rusas (fortalecimiento)

Primer mes:

  •  Ejercicios isométricos –puentes  (cuádriceps- 10 repeticiones)
  • 1mes 2 semanas ejercicios Isotónicos

Cuádriceps (10 rep)

Abductores ( 10 rep)

Aductores (10 rep)

Reeducación Marcha

Subir y bajar escalones

Paso Tande

 

RODILLA

Anatomía

Dentro de la patología traumática, la rodilla es probablemente la articulación más estudiada, la pionera en el campo de la artroscopia, la que ofrece más patología quirúrgica en un cómputo global que podría abarcar también la sustitución protésica, acercándose a la cadera en indicaciones y resultados.

Presenta algunas características que la diferencian del resto de las grandes articulaciones. La principal es que está compuesta por el juego de tres huesos, fémur, tibia y rótula. Los dos primeros conforman el cuerpo principal de la articulación, que soporta el peso corporal, y la rótula cumple una misión atípica, a modo de polea sobre la que se apoyan los tendones cuadricipital y rotuliano.

Es además una articulación bicondílea. Los dos cóndilos femorales ruedan sobre la superficie casi plana de los platillos tibiales. El apoyo de un hueso sobre otro es libre, sin topes óseos para mantenerla y necesita el amarre de los ligamentos.

Las superficies de contacto entre los huesos están cubiertas por una capa de cartílago. Todo el conjunto está envuelto por una cápsula articular, constituyendo un espacio cerrado. La cubierta íntima de la cápsula es la membrana sinovial, cuya misión principal es la secreción del líquido del mismo nombre, fundamental en la fisiología articular con misiones de lubricación y defensa. El exceso de secreción da lugar a un acúmulo sinovial que causa aumento de la presión intraarticular y genera el molesto y conocido derrame.

Estudiaremos el conjunto muscular que rodea la rodilla, con puntos de inserción por encima y por debajo de ella, la irrigación arterial y el retorno venoso y el impuilso nervioso que hace posible la estimulación y, por tanto, el funcionamiento de esta maravilla de mecánica biológica, la chispa vital que consigue el movimiento.
 

HUESOS


 

La rodilla, en realidad, no se compone de una sola articulación sino de tres:

  • Dos fémoro-tibiales, entre fémur y tibia
     
  • La fémoro-patelar, entre fémur y rótula

No describimos la articulación tibio-peronea superior que, al estar fuera del contenido capsular de la rodilla, puede ser considerada como una articulación independiente y diferenciada. Los huesos que componen la rodilla son, por lo tanto, fémur, tibia y rótula:
 

FEMUR

El fémur se extiende desde la cadera hasta la rodilla. Presenta una dirección oblicua hacia adentro, ya que la distancia entre las caderas es mayor que entre las rodillas. Para compensar en parte este acercamiento de ambos fémures al eje corporal, las tibias se separan. La rodilla adquiere así el aspecto de una articulación angulada hacia afuera, en valgo. El conjunto de los dos miembros inferiores debería presentar, por lo tanto, la forma de una ?X?. Sobre esta forma habitual, fisiológica, existen variantes de las que hablaremos más adelante.

Es el hueso de mayor longitud del organismo y constituye por sí solo el esqueleto del muslo. En su extremidad superior se articula en la cadera con el hueso coxal, presentando partes anatómicas bien diferenciadas:

  • Cabeza
  • Cuello
  • Trocánter mayor
  • Trocánter menor

El extremo superior se continúa con el cuerpo del fémur, estructura tubular o diáfisis, de forma prismática, que sirve a la inserción de los músculos del muslo y transmite las líneas de fuerza desde el tronco a la rodilla.

Termina en el extremo inferior, el que, junto con la tibia, constituye la articulación principal de la rodilla. Está formada por dos eminencias óseas o cóndilos separadas por una rampa o tróclea femoral. Sobre esta tróclea desliza la rótula.


 

ROTULA

Es un hueso aplanado, de apariencia redondeada o, mejor, ovalada, que se prolonga hacia abajo por su vértice o polo inferior. Posee dos superficies:

  • Cara anterior, convexa, sirve de polea de reflexión a los tendones del cuádriceps y rotuliano.
  • Cara posterior. Orientada hacia el interior de la articulación, presenta dos facetas, interna y externa, que contactan con los cóndilos femorales correspondientes, adaptando su forma cóncava a la convexidad de los cóndilos.


TIBIA

Junto con el peroné forma el esqueleto de la pierna, aunque es el más robusto de los dos, el que soporta el peso corporal y transmite las líneas de fuerza desde rodilla a tobillo.

Su porción superior es una plataforma dividida en dos platillos, interno y externo, que sirven de apoyo a los cóndilos femorales.

La porción inferior tiene una eminencia o maléolo interno del tobillo. Junto con el maléolo externo del peroné constituye una auténtica pinza que abraza al astrágalo.

Tibia y peroné contactan también en su porción superior en una articulación prácticamente fija, ya que sólo puede realizar movimientos de deslizamiento.
 

 

CARTÍLAGOS


 

Todas las superficies de deslizamiento articular están cubiertas por cartílagos protectores del hueso en las zonas de contacto. La fricción anómala, por mala coaptación de superficies o por sobrecarga, provocará alteraciones patológicas en estos cartílagos. El hueso, al perder su protección, también sufre daños estructurales. Todo la articulación sufrirá un proceso degenerativo, ocasionando con el tiempo una artrosis.

Existe, por tanto, una cubierta cartilaginosa para ambos cóndilos femorales, platillos tibiales y facetas rotulianas.

La capa de cartílago es más gruesa en los puntos de mayor fricción. En el fémur lo es en la porción media de los cóndilos y en la garganta de la tróclea. En la tibia aumenta en el centro de las cavidades glenoideas o platillos, y se adelgaza en la periferia.

Los meniscos o fibro-cartílagos semilunares, interno y externo, constituyen otra forma de estructura cartilaginosa en el interior de la rodilla. Resultan esenciales en el juego fémoro-tibial. Por una parte, debido a su sección prismática, adaptan la superficie de los cóndilos, convexos, a la de los platillos, prácticamente planos. Por otra, debido a su consistencia elástica, son unos perfectos amortiguadores en la transmisión del peso a través de los huesos de la rodilla.

Tienen forma de C, ya que corren paralelos al borde exterior de los dos platillos tibiales. El interno es mayor y más abierto. El externo, en cambio, es más grueso.

Ambos meniscos poseen anclajes que evitan su desplazamiento y los mantienen en su posición periférica. Los cuernos, anterior y posterior, de ambos meniscos poseen inserciones propias. Además, todo el contorno externo del menisco está unido a la cápsula articular, lo que ayuda a mantener su posición.

 

  • El ligamento menisco-femoral sujeta el cuerno posterior del menisco externo a la escotadura intercondílea.
  • El ligamento transverso une por delante los dos meniscos.
     

 

ELEMENTOS DE CONTENCIÓN ARTICULAR


 

Toda articulación, para ser congruente y mantener unidos sus elementos, necesita de estructuras de cohesión. En la rodilla son:
 

Cápsula articular

Es una vaina fibrosa que se extiende desde la extremidad inferior del fémur a la superior de la tibia, rodeando toda la articulación y dejando una solución de continuidad central, rodeando la rótula e insertándose en toda su periferia.
 

Ligamentos

Son refuerzos de la cápsula que se oponen a los desplazamientos articulares más allá del límite permisible. Además de los ya mencionados ligamento menisco-femoral y transverso, son:

  1. Ligamento lateral interno. Une fémur y tibia en su región interna e impide la apertura de la rodilla hacia el valgo.
  2. Ligamento lateral externo. Se extiende desde la porción lateral del cóndilo externo hasta la cabeza del peroné. Impide el desplazamiento lateral de la rodilla hacia el varo.
  3. Alerones rotulianos, refuerzos de la cápsula articular en su inserción rotuliana, fijan este hueso lateralmente a los cóndilos femorales. Existe, por tanto, un alerón interno y otro externo. El tendón del cuádriceps y el tendón rotuliano terminan de fijar la rótula en sentido vertical, hacia arriba y abajo respectivamente.
  4. Ligamentos cruzados, anterior y posterior. Fijan fémur y tibia, impidiendo el desplazamiento de ambos huesos sobre el pivote central más allá del límite de permisión. La descripción anatómica de su recorrido intraarticular, que expondremos a continuación, puede resultar complicada, difícil de entender, para el profano. Se simplifica mucho el concepto si imaginamos dos cordones que se cruzan en el interior de la rodilla. Uno, el cruzado anterior, va de delante atrás y de dentro afuera. El posterior va de atrás adelante y de fuera adentro.

El cruzado anterior se inserta en la espina tibial interna, recorre oblicuamente la escotadura intercondílea hasta su inserción proximal en un punto muy posterior y alto del cóndilo externo.

El cruzado posterior se cruza con el anterior en sentido antero-posterior y en sentido transversal. Desde su inserción anterior en el cóndilo interno, desciende oblicuamente por la escotadura intercondílea hasta un punto posterior de la superficie retroespinal.


 

MEMBRANA SINOVIAL


 

 

Es una membrana que recubre toda la cápsula en su cara profunda, rodeando la rodilla y formando fondos de saco en el contorno de las superficies femoral y tibial. Por delante cubre el paquete adiposo de Hoffa, almohadilla que rellena el espacio anterior de la rodilla, entre el intercóndilo y el tendón rotuliano.

Su misión fundamental es la secreción y reabsorción del líquido sinovial que baña el interior articular y constituye el medio de lubricación de todo el engranaje. En caso de inflamación, se segrega mayor cantidad de líquido del que se puede reabsorber, originándose el derrame.
 

 

MÚSCULOS Y TENDONES


 

 

La rodilla es cruzada por varios grupos musculares provenientes del muslo y de la pierna. Según su función, podemos dividirlos en flexores y extensores.
 

Extensores

El cuádriceps femoral está constituído por el recto anterior, vasto interno, vasto intermedio y vasto externo..

Todos ellos convergen en el potente tendón del cuádriceps, que se inserta en el polo superior de la rótula, se prolonga por encima de la rótula, y se convierte en el tendón rotuliano.

Su misión es la extensión de la rodilla. Debe lograrla manteniendo el equilibrio de la rótula, para que ésta deslice adecuadamente sobre la tróclea femoral. Cualquier alteración en este engranaje, es causa de los molestos problemas del aparato extensor, fundamentalmente alteraciones del cartílago rotuliano, causantes de numerosísimas lesiones en el deportista.

La cintilla íleotibial o fascia lata cubre el muslo lateralmente y se inserta en el tubérculo de Gerdy, prominencia ósea de la tibia, entre la tuberosidad tibial y la cabeza del peroné. Produce fuerzas de flexión o extensión dependiendo de la posición de la rodilla.


 

Flexores

Son músculos de la región posterior del muslo.

  • Semitendinoso.
  • Semimembranoso. Al igual que el semitendinoso, por su posición interna realiza una rotación interna de la pierna una vez que ha sido flexionada.
  • Bíceps femoral. Por su posición lateral, realiza una rotación externa tras la flexión.
  • La pata de ganso es la inserción tendinosa común de los músculos semitendinoso, recto interno y sartorio.

 

  • El músculo gastrocnemio (gemelos), también se inserta en la cara posterior del fémur y desciende hasta el talón, insertándose en el calcáneo por medio del tendón de Aquiles.
  • El poplíteo, desde cóndilo externo a parte posterior de la tibia, además de flexionar la rodilla, le imprime una rotación externa.

 


 

 

ESTRUCTURAS NERVIOSAS Y VASCULARES

 

El tronco común del nervio ciático se bifurca antes de llegar a la rodilla en ciático poplíteo externo, que rodea la cabeza del peroné, y ciático poplíteo interno, que originan varias ramas colaterales y terminales. Las más significativas son los nervios peroneos y tibiales, susceptibles de lesión por estiramiento ante diversos traumatismos de rodilla, como luxaciones o fracturas.

La rodilla tiene una inervación propia formada por ramas articulares del nervio femoral, que llegan a la rodilla a través de los nervios de los vastos y del safeno. También existen ramas articulares de los nervios tibial y peroneo común.

La arteria poplítea se origina en la femoral y cruza por detrás el hueco poplíteo, bifurcándose en la tibial anterior y el tronco tibio-peroneo. Cede varios terminales articulares. Los traumatismos de rodilla, fracturas y luxaciones, también pueden dañar esta importante arteria, dejando sin irrigación a la rodilla, pierna y pie. Su sección exige una reparación quirúrgica precoz para evitar la hemorragia y reponer el riego sanguíneo.

La irrigación de la rodilla procede de una red anastomótica o genicular que consta de un plexo superficial y otro profundo. Los vasos que componen este plexo son:

  • rama descendente de la arteria circunfleja
  • rama descendente de la rodilla de la arteria femoral
  • cinco ramas de la arteria poplítea (arteria súperomedial, súperolateral, media, ínferomedial e ínferolateral)
  • tres ramas ascendentes de la pierna. (recurrente tibial anterior y posterior y circunfleja peronea)

Al sistema arterial acompaña el venoso, de retorno, que también puede ser lesionado en traumatismos de rodilla, aunque el daño no revista la misma gravedad. La hemorragia es más fácil de cohibir y el retorno sanguíneo busca caminos alternativos a la vena dañada.
 

BURSAS


 

 

Son bolsas que cubren las zonas más protruyentes del esqueleto. Habitualmente vacías, se pueden rellenar de un líquido seroso producido en su interior tras un estímulo traumático.

Aunque existen varias bursas en torno a la rodilla, mencionaremos tan sólo la prerrotuliana, por ser origen de una inflamación muy frecuente en deportistas y en población sedentaria.

La bursitis prerrotuliana también ha sido llamado mal de monjas o mal de fregonas por ser dos colectivos en que es frecuente adoptar la posición de rodillas. La fricción directa contra el suelo causa la bursitis o inflamación de la bursa.

 

LESIONES DE LA ARTICULACION DE RODILLA

LESIONES A LOS LIGAMENTOS DE LA RODILLA

Estas resultan de caídas, lesiones en deportes y accidenstes automovilísticos. Si su tratamiento no es adecuado habrá cierta laxitud residual del ligamento y la rodilla quedara inestable.

Posteriormente, pueden ocurrir otras mas gravez, especialmente si el paciente continua con sus actividades deportivas, un atleta encontrara que dicha lesión es particularmente incapacitante, ya que la rodilla puede hacerlo caer. Los ligamentos delarodilla no pueden considerarse aisladamnete. La lesión de un ligamento principal o los meniscos pueden sufrir un desgarre o pueden haber una fractura asociada. Las lesions a los ligamentos se clasifican como:

 

  1. DISTENSION: El ligamento sufre daño, pero no hay laxitud palpable. Una distensión leve puede tratarse con un vendaje de sosoten , reposo y aplicaciones locales. Una distensión mas severa se inmoviliza mejor en yeso durante un periodo de tres semanas. Es necesario un programa riguroso de ejercicios para el cuádriceps antes de volver a entrar a acatividades de tipo deportivo.

 

  1. RUPTURA EN LA SUSTANCIA DEL LIGAMENTO: este es probablemente el tipo mas común de lesión complenta. Hay laxitud del ligamento al examinarlo clínicamente y la articulación es inestable. Las fribras del ligamneto sufren ruptura en forma individual y se desprenden y estiran. Durante la operación  es difícil identificar los extremos desgarrados y la reconstrucccion consiste en un procedim